El último informe publicado por la OMC, en conjunto con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) y el Banco Mundial explora las oportunidades y desafíos para las economías en desarrollo que surgen del comercio digital. 

El informe considera acciones de políticas públicas en las áreas de infraestructura digital, habilidades, apoyo internacional para el desarrollo de capacidades y el entorno regulatorio y político. Las cuestiones políticas específicas incluyen la moratoria del comercio electrónico de la OMC, la regulación de los flujos de datos transfronterizos, las políticas de competencia y la protección del consumidor. Aquí se comparten algunas conclusiones del informe:

Los servicios transfronterizos prestados digitalmente son el segmento del comercio internacional de más rápido crecimiento: 

El comercio digital se refiere a todo el comercio internacional ordenado y/o entregado digitalmente. Según estimaciones de la OMC, el valor de los servicios prestados digitalmente ha aumentado casi cuatro veces desde 2005, aumentando un 8,1 % en promedio por año durante el período 2005-2022, superando las exportaciones de bienes (5,6 %) y otros servicios (4,2%). Representa el 54 por ciento de las exportaciones totales de servicios.

La infraestructura y las habilidades digitales son esenciales para el comercio digital:

El acceso a una infraestructura digital rápida, asequible y confiable, así como el acceso a la capacitación en las habilidades necesarias para utilizar las tecnologías digitales, son fundamentales para permitir que las economías participen en el comercio digital y se beneficien del mismo.

En tal sentido, se han logrado avances significativos en el aumento del acceso a Internet: aproximadamente el 67 % de la población mundial tiene actualmente acceso a Internet. Sin embargo, un tercio de la población mundial, principalmente en las economías de ingresos bajos y medios bajos, todavía permanecen desconectadas.

La política comercial puede contribuir a construir una infraestructura digital más rápida, rentable y dinámica. Esto se puede lograr, por ejemplo, eliminando los altos aranceles sobre las importaciones de equipos de tecnología de la información y las comunicaciones (TIC), las políticas de importación restrictivas y la escasa competencia en los servicios de telecomunicaciones.

Los gobiernos deben establecer un entorno normativo y político que no sólo facilite el comercio en un mundo digital sino que también genere resultados inclusivos y sostenibles:

Las políticas y regulaciones deberían permitir transacciones remotas, mejorar la confianza en los mercados digitales, promover el acceso asequible y respaldar las entregas transfronterizas. Un entorno predecible e interoperable que proporcione salvaguardias adecuadas relacionadas con las transacciones en línea (como la privacidad de los datos, la protección del consumidor y la ciberseguridad) es esencial para que el ecosistema del comercio digital prospere. Las leyes y reglamentos que garantizan una fácil entrada y salida de empresas, una competencia efectiva y un régimen comercial abierto promueven una competencia sana.

La cooperación internacional abarca cada vez más las normas sobre el comercio digital:

Hasta la fecha, los avances en la gobernanza de las cuestiones relacionadas con el comercio digital se han producido en gran medida en el contexto de acuerdos comerciales (ACR) bilaterales y regionales. A finales de 2022, había 116 acuerdos con disposiciones sobre comercio digital, lo que representa el 33% de todos los ACR existentes. En general, desde 2001, el 44 % de los acuerdos firmados contienen al menos una disposición sobre comercio digital o comercio electrónico. Sin embargo, sólo unos pocos Países Menos Adelantados son parte en ACR que incluyen disposiciones sobre comercio digital.

La moratoria de la OMC sobre la imposición de derechos de aduana a las transmisiones electrónicas está atrayendo la atención en el período previo a la 13ª Conferencia Ministerial de la OMC (MC13):

Es la única disposición de la OMC que se aplica explícitamente al comercio electrónico y ha estado vigente desde 1998. También se han incluido compromisos adicionales de no imponer derechos aduaneros a las transmisiones electrónicas en 88 ACR que involucran a un total de 87 países, de las cuales 33 son economías en desarrollo. En junio de 2022, en la CM12, los miembros acordaron prorrogar aún más la moratoria “hasta la 13.ª Conferencia Ministerial o el 31 de marzo de 2024, lo que ocurra primero”. En esta reunión, los miembros también acordaron “intensificar las discusiones […] incluso sobre el “alcance, definición e impacto” de la moratoria”.

Fuente:  The International Monetary Fund, the Organisation for Economic Co-operation and Development, the United Nations, The World Bank and the World Trade Organization: “Digital Trade for Development” (2023).